“TODO PASA Y TODO QUEDA, pero lo nuestro es pasar”; ¡en efecto!, son palabras de Antonio Machado que, sazonadas con los sabrosos añadidos de Joan Manuel Serrat, forman parte de “Cantares”, pieza musical que sin duda aprendiste de memoria muchos años antes de que concluyera el siglo XX… TÚ ME LEES, AMABLE LECTOR, pero no tengo manera de saber cómo se cierra el círculo de este proceso elemental de comunicación que –idealmente- debería concluir cuando respondas a mi mensaje; pero te pediré algo que tal vez suene medio loco y deschavetado… EN TU CABEZA Y TU CORAZÓN ciertamente hay algún canto que amalgamó recuerdos infantiles y pintó con ilusiones tus juegos inocentes (el rey de chocolate, la víbora de la mar, los elefantes y la tela de araña), acaso algún cántico religioso (la calzada de Emaús, pescador de hombres, desde el cielo una hermosa mañana), o tal vez uno que avivó tu juventud y te hizo soñar el amor ideal (aquí no pongo ejemplo, ¡hay tantos gustos y géneros!)… POR FAVOR ESCOGE alguno de esos cantos y haciendo pausa en la lectura ponte a cantarlo con emoción y valentía, con ganas y con gusto; ten por cierto que yo no escucharé absolutamente nada, pero quien está cerca de ti te preguntará: ¿ahora qué traes?, ¿qué te picó?, ¿te sientes bien?; tú sabrás que estás correspondiendo a esta lectura… QUE SI EL QUE CANTA su mal espanta, que si el que come y canta loco se levanta, que si el que canta ora dos veces, que si canta y no llores porque cantando se alegran –cielito lindo- los corazones; en efecto, anímate y cierra el círculo de esta breve comunicación ¡cantando lo que a ti te gusta!… EL PASADO VIERNES 22 de agosto el Santo Padre nos invitó a una jornada de oración y ayuno en favor de la paz; sin duda tantos y tantos alrededor del mundo se unieron en esta bella intención, y como si fuera un eco de tan noble iniciativa, te sugiero que sigas extendiendo la jornada dicha pero ¡cantando!… SÓLO TE PEDIRÍA un requisito: que no fuera una canción de despecho, de apología del crimen, de mera borrachera o parranda, de ofensa o desprecio, porque el verdadero canto –así me parece- debe unir corazones y voluntades (como un himno nacional), debe exaltar valores y bellezas (como una auténtica balada), debe conducirnos a una alegría constructiva (¡que sirvan las otras copitas de mezcal! –ups!- ¿te lo sabes?); un buen canto es de humanos, no de bestias ni de tiranos… JESÚS SIEMPRE COMPARÓ el reino de los cielos a un banquete, a una fiesta, y de ordinario ahí hay música y cantos; nunca comparó el reino de Dios a una sala de cine (cada quien en su butaca), ni a un estadio de futbol (todos en masa loca), ni a un velorio (cada quien en su grupito contando chistes)… NO SÉ DE DÓNDE viene –directamente- la imagen de “el coro de los ángeles”, o de las almas en su nube y con un arpa en la mano; lo que sí es claro y cierto son los músicos en la corte del rey David, y los salmos con una constante invitación a la alabanza (asómate y “asálmate” entonando el salmo 150); si ahora cantas, ya estarás ensayando para llegar al reino de los cielos… ME RESULTA CONTRASTANTE que quienes saben cantar, cuando me oyen dicen que canto muy mal; y cuando me escuchan los que no cantan ni pío me halagan con piropos que casi me siento Pavarotti o Caruso (n.b.: Enrico Caruso, tenor italiano de fama internacional, fue uno de los primeros en grabar su canto, murió en 1921); lo que hago es quedarme en medio y seguir cantando… NO ESTÁS PARA SABERLO, pero cantando he sacado algunos demonios (me escuchan y ¡se espantan!), cantando he motivado a muchos a dejar atrás su tristeza (si, padre, ya no lloraré pero deje de cantar!), cantando he logrado que insomnes concilien el sueño (al menos fingen dormir para que me calle), cantando he logrado unir voluntades (casi todos contra mí) y cantando he querido alabar a Dios, el único que no me ha reclamado en vivo y en directo (ya me regañará en la eternidad)… EN MÁS DE QUINCE AÑOS que llevo escribiendo en este medio, no recuerdo haberte pedido que cantes, y hoy más que pedirlo, casi te lo exijo como retribución y pago, como tarea y deber, como apostolado realizado en tu favor, como disciplina para que valores a profesionales y para que soportes a novatos, como siendo tú mismo el primer destinatario de algo que debe ser bello, armonioso, tranquilizador; aquí le dejo y yo también cantaré en favor de la paz…
Proteger los templos no es sólo asegurar paredes y atrios, es garantizar que cada persona…
Carlo Acutis nos dejó un legado de frases que siguen iluminando el corazón de muchos.…
Jesús interpretó que quien le preguntaba: “¿Es verdad que son pocos los que se salvan?”…
Jesús llama al esfuerzo personal, la salvación no es una cuestión predeterminada para unos afortunados,…
Con un equipo creativo detrás de clásicos de Disney, la película "Jesús, Luz del Mundo",…
Las cosas por limpiar sigue siendo una miniserie vigente que muestra la resiliencia y el…
Esta web usa cookies.