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Una de las razones que pueden alejar a los católicos del Sacramento de la Confesión es la posibilidad de que un sacerdote le cuente a otras personas los pecados que alguien le ha confesado. ¿Este temor es real?, ¿los sacerdotes pueden revelar a otros mis pecados?
Para responder a esta pregunta, el padre Salvador Martínez, Vicario Episcopal Territorial para la III Zona Pastoral de la Arquidiócesis Primada de México, explicó que el sacerdote tiene prohibido hacer revelación sobre lo que ha escuchado durante una confesión.
“El sacerdote no puede revelar ni puede contarle a otros lo que alguien le contó durante la confesión porque existe algo que se llama el sigilo sacramental, la garantía de que aquello que uno expresó en los momentos en los cuales se estaba confesando, va a quedar completamente sellado, completamente secreto. Ni el mismo sacerdote lo puede usar con el penitente en otra ocasión. Eso queda completamente sellado, olvidado”, dijo.
Además, Monseñor Martínez, quien fue rector de la Basílica de Guadalupe, aseguró que los fieles también deben guardar el secreto de sus confesiones.
“También se esperaría que, de parte del penitente, se guarde también sigilo, es decir, que el mismo penitente tampoco revele a nadie lo que él mismo confesó o lo que el sacerdote le dijo durante el Sacramento de la Confesión”, declaró.
El Código de Derecho Canónico es muy claro al respecto, al afirmar que “el sigilo sacramental es inviolable; por lo cual está terminantemente prohibido al confesor descubrir al penitente, de palabra o de cualquier otro modo, y por ningún motivo”.
También dice: “Está terminantemente prohibido al confesor hacer uso, con perjuicio del penitente, de los conocimientos adquiridos en la confesión, aunque no haya peligro alguno de revelación”.
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