La Biblia fue escrita de manera conjunta y colaborativa por Dios y por algunos seres humanos. Foto Especial.
La Biblia fue escrita por muchos autores, a lo largo de muchos siglos, pero con una sola voz espiritual. La Biblia no es un solo libro, sino una colección de 66 libros (en la tradición protestante) o 73 libros (en la tradición católica), redactados en un período de aproximadamente 1500 años. Estos autores provenían de contextos muy diversos: profetas, reyes, pastores, pescadores, médicos, cobradores de impuestos y más.
Aunque los autores eran distintos y vivieron en épocas muy diferentes, los cristianos sostenemos que todos fueron inspirados por Dios para transmitir un mensaje coherente de salvación, justicia, y amor. Esta inspiración no significa dictado literal, sino una guía espiritual, un influjo divino que, respetando el estilo, contexto y personalidad de cada escritor, garantiza que en las Sagradas Letras se plasmara sin defecto todo aquello que lleva a la plena realización personal y social.
Así pues, afirmamos que la Biblia fue escrita de manera conjunta y colaborativa por Dios y por algunos seres humanos. Dios como Autor principal y el hombre como autor verdadero: “Dios es el autor principal de la Biblia, pero los hombres escribieron como verdaderos autores, inspirados por el Espíritu Santo.” (Dei Verbum, 11).
La Biblia es considerada la Palabra de Dios, no porque Dios haya dictado cada palabra literalmente, sino porque Él inspiró su contenido. Es decir, Dios quiso revelarse a la humanidad y eligió hacerlo a través de la historia, diversos géneros literarios (poesía, profecía, parábolas, epopeyas, leyendas, mitos, etcétera) que contienen la enseñanza de Dios para la salvación universal.
Los escritores bíblicos no fueron meros instrumentos pasivos. Dios respetó su libertad, cultura, estilo literario y contexto histórico. Cada autor escribió “todo aquello y solo aquello que Dios quería”, pero lo hizo con su propia voz, experiencia y sensibilidad.
Este equilibrio entre lo divino y lo humano hace de la Biblia una obra única: no solo un texto religioso, sino una experiencia viva de encuentro entre Dios y la humanidad.
No hay un consenso universal o mayoritario sobre los autores o redactores finales de cada escrito bíblico. Lo que podemos decir es que la fecha aproximada del libro más antiguo de la Biblia dataría de alrededor del 1200-1500 a.C y el libro más nuevo sería de finales del año 100 o 110 de nuestra era.
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