¿Qué significa el escudo del Papa León XIV?

El Papa León XIV decidió seguir utilizando el escudo que eligió para su consagración episcopal, el cual está profundamente arraigado en la tradición agustiniana y contiene un lema que llama a la unidad en Cristo y con el que manifiesta su intención de guiar a la Iglesia con espíritu de comunión.

La elección de los símbolos que se integran en el escudo papal dado a conocer por la Santa Sede, no es meramente decorativa, sino que es una expresión clara de la visión teológica y pastoral que tendrá el nuevo pontificado encabezado por el Papa León XIV.

Un escudo cargado de simbolismo espiritual

El 10 de mayo de 2025, la Oficina de Prensa del Vaticano dio a conocer oficialmente el escudo y el lema que utilizará durante su pontificado el Papa León XIV, decidió mantener el diseño que lo ha acompañado desde su consagración episcopal, realizada el 12 de diciembre de 2014, el cual muestra una división diagonal en dos partes:

1. En la parte superior, sobre un fondo azul, destaca un lirio blanco, símbolo tradicional de pureza.
2. En la parte inferior, sobre un fondo claro, se encuentra un emblema profundamente agustiniano: un libro cerrado sobre el que reposa un corazón atravesado por una flecha. Esta imagen hace referencia directa a la experiencia de conversión de san Agustín, quien expresó: “Vulnerasti cor meum verbo tuo” (“Has traspasado mi corazón con tu Palabra”).

El escudo del Papa León XIV, señaló el vicepresidente del Instituto Heráldico Genealógico Italiano, el padre Antonio Pompili, es “sostenido por las llaves petrinas”, está atado por un cordón rojo y está dividido en dos secciones:

“Una con fondo azul, un color que recuerda las alturas de los cielos y se caracteriza por su valor mariano, símbolo clásico en referencia a la Santísima Virgen María, el lirio (flos florum)”; la otra en tonos marfil, un color que puede leerse como símbolo de santidad y pureza, donde destaca el emblema de la Orden Agustiniana, el corazón atravesado por una flecha colocado sobre un libro.

“Esta figura representa simbólicamente las palabras de san Agustín recogidas en las Confesiones (libro noveno, 2,3 ed. ): ‘Sagittaveras tu cor meum charitate tu a’, ‘Has herido mi corazón con tu amor’”, especificó el padre Pompili.

El corazón, un emblema de los Agustinos

El vicepresidente del Instituto Heráldico Genealógico Italiano destacó que el corazón representado en el escudo del Papa León XIV es un “elemento” que “ha estado presente siempre en el emblema de los agustinos”, desde el siglo XVI, “incluso con diferentes variantes, como la presencia del libro que simboliza la Palabra de Dios capaz de transformar el corazón de todo hombre, como fue para Agustín”.

Además, subrayó el padre Antonio Pompili, “el libro también recuerda las obras iluminadas que el Doctor de la Gracia ha donado a la Iglesia y a la humanidad”.

¿Cuál es el lema del Papa León XIV?

El lema del Papa León XIV, In Illo uno unum (“En el Uno, uno”), proviene de un sermón de san Agustín, específicamente de su Exposición del Salmo 127, pasaje en el que el Obispo de Hipona explica que, aunque los cristianos sean muchos, en Cristo son uno solo.

Con esta frase se resume el deseo del Sucesor de San Pedro de fomentar durante su pontificado la unidad eclesial, en consonancia con el carisma de la Orden de San Agustín, a la que pertenece.

Una visión centrada en la unidad y la comunión

En una entrevista concedida en julio de 2023, cuando aún era Obispo, León XIV explicó el significado que había detrás de su lema y su escudo:

“La unidad y la comunión forman parte del carisma de la Orden de San Agustín y también de mi forma de actuar y pensar. Creo que es fundamental promover la comunión en la Iglesia”, indicó en dicho encuentro con los medios de comunicación.

En este sentido, el Pontífice subrayó que los principios de comunión, participación y misión, pilares del proceso sinodal, son también ejes esenciales de su ministerio pastoral.

“Por lo tanto, como agustino, para mí, promover la unidad y la comunión es fundamental. San Agustín habla mucho de la unidad en la Iglesia y de la necesidad de vivirla”, concluyó el ahora Papa León XIV.