La parroquia de la Santa Veracruz, ubicada en el Centro Histórico de la Ciudad de México, cerrará sus puertas de manera temporal, en recomendación del dictamen de la Secretaría de Gestión de Riesgos y Protección Civil, realizado tras el sismo del 19 de septiembre de 2017, debido a un riesgo de colapso.
Esta medida fue respaldada por el párroco Bernard Olorunfemi y Norma Solís Pérez, coordinadora de la Renovación Católica en el Espíritu Santo, quien a principios de esta semana advirtió sobre el dictamen que determinaba el cierre del templo, lo que generó inquietud entre los miembros del movimiento, toda vez que ésta es su sede.
A través de un comunicado, que firman el párroco y la coordinadora, explican que sólo la nave principal del templo permanecerá inhabilitada para salvaguardar la seguridad de las personas. “Como iglesia entendemos la responsabilidad que implica asegurar que los fieles puedan profesar su fe sin riesgo a su integridad”.
El sacerdote detalló que en las reuniones que ha sostenido con las autoridades de la administración anterior y actual, ha habido apoyo y disposición para la restauración del templo. Asimismo, aseguró que no se suspenderá ninguna actividad, sólo habrá reacomodo de los espacios.
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En tanto, el dictamen, que fue realizado en octubre de 2018, expone que la parroquia sufrió severos daños en las dos torres y “se observan desplomes, hundimientos y posibilidad de colapso de algunas canterías que decoran la iglesia, apuntalamientos inadecuados en el arco del acceso principal”. Debido a esta información, el Director Responsable de Obra consideró que el inmueble es de “ALTO RIESGO Y NO HABITABLE.”
En esta misma situación se encuentran 11 iglesias más y casi la mitad de ellas se ubican en el Centro Histórico, como el templo de la Santísima Trinidad, templo de la Santa Catarina Virgen y Mártir, templo de Nuestra Señora de los Ángeles y templo de San Fernando Rey.
Por ello, señala el párroco en el comunicado, invita a la feligresía a que vean el lado positivo de esta situación y oren por todos los responsables y protagonistas del avance de la restauración. “Existe buena fe en todos los involucrados en estas acciones. Los exhorto a una actitud de fe y confianza en Dios. Todo está bien y va a terminar mejor”, dijo.
Ubicada a un costado de la Alameda Central, esta parroquia es una de las más antiguas de la Ciudad de México, pues fue fundada como ermita por Hernán Cortés en 1526, para albergar a la Archicofradía de la Cruz; la Iglesia parroquial fue construida en ese mismo siglo (1568), pero luego fue substituida por el actual templo en el siglo XVIII, en la llamada Plaza Santa Veracruz.
Entre las obras históricas que adornan su interior se encuentra el llamado “Cristo de los Siete Velos” y la “Virgen de los Remedios”, además de valiosos archivos históricos que datan del siglo XVI y que contienen una parte importante de la historia de México.
La Parroquia de la Santa Veracruz es la sede actual de la Renovación Carismática en el Espíritu Santo, movimiento que se ha comprometido a aportar una parte de los recursos para la restauración integral del templo, misma que requiere el involucramiento de toda la comunidad.
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