El P. Brian Kolodiejchuk, Misionero de la Caridad y postulador para la causa de canonización de la Madre Teresa de Calcuta, en entrevista con Desde la fe compartió las cinco visiones que tuvo la religiosa albanesa, naturalizada india.
Cuenta el sacerdote que conoció a Madre Teresa cuando tenía 21 años, eso se lo debe a que una hermana de él también es Misionera de la Caridad, y gracias a ella tuvo oportunidad de conocerla. El P. Kolodiejchuk es uno de los primeros sacerdotes de la orden de los Padres Misioneros de la Caridad, “somos el quinto hijo de Madre”.
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“Hay una carta de Madre Teresa en donde dice que lo que es Calcuta para las hermanas, Tijuana es para los padres misioneros, es decir, la Casa Madre”, aseguró el sacerdote.
El presbítero escribió el libro titulado “Ven sé mi luz” donde se comparten numerosas cartas que la monja escribió a sus directores espirituales y comparte su relación con Jesús.
Agnes Gonxhe, conocida como Madre Teresa de Calcuta, descubrió su vocación religiosa a temprana edad. A los 18 años ingresó a la Orden de las hermanas de Loreto en Irlanda, una congregación que también estaba en India. Años más tarde, ella fue enviada a ese país como profesora de una de las escuelas para niñas de clase alta.
El Misionero de la Caridad, explicó que “el 10 de septiembre de 1946, Madre Teresa de Calcuta era una religiosa de la Congregación de las Hermanas de Loreto”. Tenía que hacer unos Ejercicios Espirituales en Darjeeling, al norte de India, en la frontera con Nepal. Mientras tomaba el tren de Calcuta a Darjeeling, “Madre Teresa vio en el piso a un moribundo, en ese momento tuvo una locución interna. Era como el mismo Cristo que estuviera golpeado, humillado en la pasión que le pedía: Dame de Beber, Tengo Sed de ti, de que me ames. Ellos no me conocen, por lo tanto, no me aman. ‘Ven Sé mi Luz’”.
Recibió “un llamado dentro de un llamado”.
Jesús le dice que tiene que ir a los rincones más oscuros donde no lo conocen, en consecuencia, no me aman.
Madre Teresa “escuchó la Voz de Jesús, y era una voz muy distinta, no fue como una meditación de la mañana. Era la Voz de Jesús, eso fue todo el año del 46, empezando por septiembre”, resaltó el P. Kolodiejchuk.
Prosiguió el sacerdote: Aparece un diario en las cartas al arzobispo que cada comunión Jesús me dice: ¿Me vas a negar? Porque vino el 10 de septiembre, donde Jesús le pide a Madre dejar a las hermanas de Loreto, que fue un gran sacrificio dejar la comunidad y empezar este nuevo apostolado con los pobres.
Jesús diario le decía, ¿me vas a negar?, en el libro “Ven sé, mi luz” se pueden leer 2 cartas que más representativas de diciembre del 47. Este diálogo, entre Jesús y la madre, no, yo no soy digna, ¿no puede ser otra hermana de Loreto mejor que yo y que ella empiece?
El P. Kolodiejchuk, explicó que “en una carta en 1947, hay tres visiones de Madre Teresa, no sabemos si son al mismo tiempo, pero son ese año.
“Los pobres están pidiendo a la Madre Teresa, empezar esta obra para ellos”. Es por ello, que de ahí viene el cuarto voto, el libre y total servicio a los más pobres de entre los pobres.
“Madre, vio lo complicado y el sufrimiento de los pobres, no solo lo material, sino interiormente”, aseguró el presbítero
El Postulador narra como la Santa vio una multitud de pobres, la Virgen María estaba ahí en medio de ellos y la religiosa estaba de rodillas a su lado. Escuchó que le decía: “Cuida de ellos, ellos son míos, llévalos a Jesús. No temas, enséñales a rezar el Rosario, el Rosario en familia, y todo estará bien, sin miedo. Jesús y yo estaremos contigo y tus hijos”.
Madre Teresa tenía un profundo amor a la Virgen, es por ello por lo que las hermanas tratan de rezar todos los misterios del Rosario en el día. Teniendo en María una total confianza amorosa.
El P. Kolodiejchuk explicó por último la quinta visión: “Es la misma gente que con Nuestra Señora, pero estaban cubiertos en tinieblas. Allí en medio de una multitud temerosa que no parecía darse cuenta de su presencia, estaba Jesús en la Cruz. La Virgen estaba delante de Jesús, y este le decía: Los pobres han pedido, mi madre te ha pedido. Ahora yo te lo pido ¿Me vas a negar? Haz esto por mí”.
El Misionero de la Caridad, recalcó que “en 1942, Madre Teresa hizo un voto privado de ‘no rechazar a Dios en nada’, Madre, nunca va a decir, no deliberadamente a algo porque es la Voluntad de Dios”.
Aunque fuese algo pequeño, que podría ser pecado venial, si se lo pedía Jesús para ella sí era pecado.
Hoy en día hay más de 5,000 Misioneras de la Caridad en los 5 continentes, y en los países de mayor dificultad como: Haití, Cuba, Sierra Leona, Yemen, Ucrania, entre otros. Sirviendo en asilos en todo el mundo. Ellas proporcionan cuidados básicos como alimentos, refugio y medicinas a personas vulnerables en todo el mundo, incluyendo refugiados, niños y adultos con enfermedades crónicas y terminales, niños abandonados, leprosos, personas que viven con VIH o sida, ancianos y personas con discapacidad mental.
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