San Juan Diego, con su ejemplo de vida sencilla y profundamente mariana, está ayudando a evangelizar Buenos Aires, así lo dijo el padre Mario Gabriel Michelli, quien desde hace 6 años es párroco del templo que lleva el nombre de este santo en Buenos Aires, Argentina, y donde se atienden a unos 16 mil fieles, muchos de ellos migrantes que viven en un barrio popular.
La parroquia se creó en 1995, cuando el Cardenal Jorge Mario Bergoglio, quien ahora es el Papa Francisco, era Obispo Auxiliar en la Vicaría Flores, en Buenos Aires.
Inició como una carpa de 10 por 20 metros, pero los propios vecinos estuvieron interesados en que se edificara un templo más grande y digno, y así, con el apoyo de las comunidades cercanas que radicaban en modernos conjuntos habitacionales, la iglesia se edificó en medio de áreas verdes.
Este junio de 2022, el padre Michelli visitó México y acudió a la Basílica de Guadalupe, donde explicó en entrevista que el Santo Padre sigue pendiente del acontecer de la parroquia y su comunidad.
Incluso le dejó una carta al párroco dedicada a toda su comunidad donde dice: “Sean siempre humildes y sencillos, servidores de todos, como lo fue san Juan Diego Cuauhtlatoatzin. Saludos a todos. Jesús los bendiga y la Virgen Santa María de Guadalupe los cuide. Y no te olvides de rezar por mi ante Ella”.
Para la parroquia de San Juan Diego en Argentina, acoger e integrar a los migrantes es una de sus funciones más importantes. “Como comunidad, aunque es muy plural, hay un deseo generalizado de vivir la espiritualidad de San Juan Diego, cuya devoción se ha incrementado desde que esta parroquia abrió sus puertas, así como el maternal mensaje de la Virgen de Guadalupe ayuda a dar consuelo a todos”.
“Es una parroquia muy conocida y querida en Buenos Aires, y en esta época de pandemia en la que a mucha gente ha estado encerrada y aislada, San Juan Diego y la Virgen de Guadalupe han sido una herramienta, un canal de diálogo y encuentro con Jesucristo”, dijo.
El entonces Cardenal Jorge Bergoglio, ya como Arzobispo de Buenos Aires, nombró a san Juan Diego como patrono de los floricultores y floristas.
El templo fue terminado en 2015, y fue inaugurada con una gran fiesta el Primero de Mayo, en medio de peregrinaciones con la imagen de la Virgen de Guadalupe, provenientes de distintos barrios de la ciudad.
“Ellos lo sienten muy propio y le tienen mucho cariño a Juan Diego; con frecuencia acuden a la parroquia para recibir bendiciones y esperamos que esta devoción se siga incrementando. La parroquia se encuentra en un barrio popular, y a pesar de que las flores son algo costosas, nunca faltan en el templo”.
La Parroquia San Juan Diego está ubicada en Av. Escalada 2858, en Buenos Aires, Argentina.
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