Conoce la historia de la familia Ulma, beatificada por el Papa Francisco por ser un ejemplo de “amor evangélico” al proteger a judíos en la Segunda Guerra Mundial
La familia integrada por Józef y Wiktoria Ulma y sus siete hijos fueron beatificados por ser un ejemplo de “amor evangélico”, así lo calificó el Papa Francisco el domingo 10 de septiembre cuando se dirigió a las personas congregadas en la Plaza de San Pedro para rezar la oración del Ángelus.
La familia Ulma, que profesaba la fe católica, vivía en la ciudad polaca de Markowa.
Józef y su esposa Wiktoria tuvieron 7 hijos Stanisława, de 8 años, Barbara, de 7 años, Władysław, de 6 años, Franciszek, de 4 años, Antoni, de 3 años y Maria, de 2 años.
Durante la ocupación nazi, la familia Ulma fue denunciada por un miembro de la Policía Azul y “exterminada el 24 de marzo de 1944, por albergar a algunos judíos que estaban siendo perseguidos”, expresó el Papa.
Al momento de su ejecución Victoria se encontraba embarazada de su séptimo hijo.
Las personas judías a las que protegía la familia Ulma eran Saul Goldman y sus hijos Baruch, Mechel, Joachim y Moses, así como Golda Grünfeld y su hermana Lea Didner y su pequeña hija Reshla, quienes también fueron asesinadas.
El Papa francisco declaró mártires a toda la familia el 18 de diciembre de 2022 y el 10 de septiembre fueron beatificados en Markowa en una Misa presidida por el Marcello Semeraro (en nombre del Papa Francisco).
Francisco señaló que la familia Ulma “contrarrestó el odio y la violencia que caracterizaron aquella época, con amor evangélico”.
El Santo Padre rezó para que “esta familia polaca, que representó un rayo de luz en la oscuridad de la Segunda Guerra Mundial, sea para todos nosotros un modelo a imitar en la lucha por el bien y en el servicio a los necesitados”.
La familia Ulma ha sido reconocida y honrada póstumamente por su valiente acto de humanidad.
En 1995, el Instituto Yad Vashem en Jerusalén les otorgó el título de “Justos entre las Naciones”, un honor conferido a personas que arriesgaron sus vidas para salvar a judíos durante el Holocausto. Además, en Polonia se erigió un monumento en su memoria en la aldea de Markowa, que conmemora su sacrificio y su valentía. Su sacrificio ha sido un ejemplo de inspiración para muchas personas en todo el mundo.
La beatificación de la familia Ulma es única dentro de la Iglesia Católica, ya que son los primeros en ser beatificados como una familia completa en la historia de la iglesia.
La fiesta elegida para la familia Ulma es el 7 de julio, aniversario de bodas de Józef y Wiktoria.
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