Jonathan Blevins es el fundador del canal BeardedBlevins de Twich, y a través de él, como católico, esposo y padre de tres hijos, busca formar una comunidad positiva de gamers. Antes de cada sesión, pide la intercesión de san Francisco de Asís.
Twitch es una plataforma que permite realizar transmisiones en vivo. La mayor parte de sus usuarios (streamers) la usan para ver o transmitir partidas de videojuegos en directo.
Jonathan encontró ahí una oportunidad de evangelizar a la juventud a partir de las comunidades de juegos, con una transmisión sana y alegre, y varios streamers católicos se le han sumado en esta aventura de encontrar y compartir “lo bueno en los videojuegos”.
Su objetivo ha sido construir una comunidad de apoyo donde los usuarios puedan sentirse cómodos y acogidos, pese a que el medio, por su naturaleza competitiva, está abierto a jugadores tóxicos y trolls que no fomentan precisamente una diversión y competencia sana.
“He estado familiarizado con Twitch durante años y hay muchos creadores de contenido geniales para toda la familia en la plataforma. Sin embargo, hay más streams que tienen éxito por la toxicidad del streamer o de la comunidad.”
La fe de Jonathan ha atraído a los gamers espectadores, así como su carisma y humildad; además de ser muy hábil con el controlador. Él ha demostrado que se puede vivir en el mundo secular, hace referencias cristianas de manera abierta y sus transmisiones suelen terminar con oraciones por los que sintonizaron.
Blevins no predica a los jóvenes, sino muestra con el ejemplo cómo se puede llevar una vida católica y mantener la fe en espacios de la vida cotidiana, en este caso, en los videojuegos.
“Me propuse traer algo bueno a los juegos y mostrarle a la gente que pueden suceder grandes cosas cuando Cristo está en el centro.”
Para BeardedBelvins no ha sido necesario organizar sesiones de enseñanza ni dar conferencias sobre fe cristiana a la gente, las reacciones que surgen de los jugadores al hablar de temas católicos son generalmente de fascinación y gratitud.
La fe surge en ellos una vez empiezan a confiar en el canal, debido a la amabilidad que existe dentro de esa comunidad.
A menudo, antes de cada transmisión, Jonathan le pide a san Francisco de Asís su intercesión.
“Todo lo que hacemos puede tener a Dios en el centro si estamos entrando en ello con la correcta disposición de nuestro corazón.”
*Con información de Aleteia
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