Categorías: Editorial

El dolor del pobre nos llama a trabajar unidos

El fenómeno de la pobreza en el mundo es, desde luego, un problema multifactorial; pero en el caso particular de México, éste hunde sus raíces principalmente en un sistema político y social cimentado en la corrupción, la ambición y la codicia, lo que ha traído como consecuencia un deterioro en el poder adquisitivo, altos niveles de desempleo, bajo desarrollo empresarial y la concentración de la riqueza en pocas manos.

Ante este panorama, la Iglesia no ha renunciado a su deber de denunciar la injusticia social, que frecuentemente se relaciona con la acumulación de la riqueza inmoral. Pero sobre todo, no ha cejado en su empeño por dar una respuesta efectiva en el combate a la pobreza a través de la caridad.

Resulta imposible citar todas las acciones que realiza la Iglesia católica a favor de los pobres, pero no hay duda de que se trata de la institución que más hace por abatir este flagelo: escuelas, hospitales, casas hogar, asilos, bancos de alimentos y comedores, son sólo algunas de las obras a través de las cuales hace presente la misericordia de Dios, y que abordamos ampliamente en esta edición de nuestro semanario.

Sin embargo, la historia nos recuerda que todo esfuerzo, si se realiza de forma aislada, se convierte sólo en un paliativo ante la magnitud del problema, por lo que las sinergias entre los distintos entes sociales se hacen cada vez más necesarias, así como la capacidad de compasión, el sufrir con el otro a la manera de Cristo, ofreciendo redención por medio de la caridad, la solidaridad y la promoción de la persona para que alcance la plenitud en el desarrollo de su vocación, y así ser partícipes de un mundo más en comunión de amor.

La Iglesia, por su parte –que ve en el pobre la imagen sufriente de Cristo–, está llamada a redoblar esfuerzos para tenderles eficazmente la mano. Sólo así, la caridad cristiana, que en los primeros años suscitaba la admiración de los paganos, seguirá siendo motivo de asombro y podrá atraer el apoyo de otras organizaciones a fin de incrementar y ampliar las obras en beneficio de tantos hombres y mujeres pobres, cuyo grito de dolor se sigue ahogando en la indiferencia generalizada.

Lee: La Soledad, parroquia que integra a los más vulnerables. 

DLF Redacción

La redacción de Desde la fe está compuesta por sacerdotes y periodistas laicos especializados en diferentes materias como Filosofía, Teología, Espiritualidad, Derecho Canónico, Sagradas Escrituras, Historia de la Iglesia, Religiosidad Popular, Eclesiología, Humanidades, Pastoral y muchas otras. Desde hace 25 años, sacerdotes y laicos han trabajado de la mano en esta redacción para ofrecer los mejores contenidos a sus lectores.

Entradas recientes

Canta con el Papa! La iniciativa del Vaticano para aprender los cantos litúrgicos en línea

El padre Robert Mehlhart, presidente del Pontificio Instituto de Música Sacra (PIMS), ha lanzado una…

3 horas hace

Construyen capilla en un centro de detención para que las jóvenes presas oren y reflexionen

La Arquidiócesis de México y autoridades penitenciarias de la CDMX construyeron una Capilla en un…

3 horas hace

Tener hijos pequeños no es pretexto para dejar de ir a Misa

Tener niños pequeños no es pretexto para no ir a Misa, por el contrario que…

4 horas hace

¿Cuál es la leyenda del Cristo Negro de Salamanca?

El Cristo Negro de Salamanca o el Señor del Hospital, ha sido un símbolo de…

5 horas hace

¿Cómo hacer que tus hijos se porten bien en Misa? Los 8 consejos de un sacerdote

El padre Antúnez, director de Pastoral Infantil de la Arquidiócesis de México, comparte 8 consejos…

6 horas hace

Escuelas religiosas: ¿Cuáles son las congregaciones dedicadas a la educación?

En México, la educación católica ha tenido una influencia importante a lo largo de toda…

6 horas hace

Esta web usa cookies.