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  COLUMNA INVITADA Por P. ÓSCAR ARIAS
Presidente de Cáritas Arquidiócesis de México.
Rumbo a la Jornada Mundial de los Abuelos y Mayores
@desdelafemx
         En la vejez, seguirán dando fruto” (Salmo 92,15)
Se ha elegido esta frase para hablar de las personas Mayores, con ocasión de la II Jornada Mun- dial de los Abuelos y lo que gira en torno a ellos. Para la cultura cristiana, es muy común hablar de aspectos importantes, con alegorías o comparaciones sencillas de la vida cotidiana; es así, que el tema de la siembra, la cosecha -un concepto que viene revestido de la vida natural y coti- diana de la gente de campo- se aplica para valorar la experiencia de aquellas personas que habiendo hecho elecciones importan- tes en otro momento de su historia, siguen produciendo frutos; de aquellas decisiones, que aunque hayan pasado muchos años, en lugar de reducirse a cenizas, sus familias son como árboles frondosos donde se vie-
nen a formar muchos nidos.
Figuras simples como la de aquellos
árboles ancianos, cuyo tronco, con el tiem- po se hizo tan robusto que puede albergar un columpio, una casa, un anuncio y tantas otras cosas que pueden colgar de él, porque su grosor lo permite. Como aquellos árboles cuyo ramaje es tan denso, que los pasean- tes gustan de sentarse a sus pies para re- frescarse un poco y resguardarse del intenso calor.
Y qué son nuestros abuelos, sino ese frescor en un día lleno de ajetreo, porque llegar siempre a su casa reconforta el es- píritu, el corazón y hasta el estómago. Qué son los abuelos, sino ese regazo, que como aquél sillón, veló por tantas ocasiones un sueño reparador. Qué son los abuelos, sino ese calor de hogar, como cálidas sus manos que se atreven a acariciar al más rebelde
de los nietos. Qué son aquellas figuras, que aunque por fuera ya parecen débiles, son más fuertes que todos los hijos juntos, porque supieron educarlos, alimentarlos y sacarlos adelante, con su mayor y más afectuoso esfuerzo.
Dice otro fragmento de la Biblia: “por sus frutos los reconocerán...” y esos, somos nosotros, porque nos constituimos en su herencia viviente, nosotros somos el legado que los abuelos entregan al mundo, por ello debemos honrarlos con nuestro com- portamiento, con nuestro cariño, con el atento cuidado que les brindamos y con el profundo respeto que generan en no- sotros, todos los años vividos.
Es así, que con este tipo de compara- ciones sencillas, se habla de un tema básico para la sociedad actual: sus raíces, sus troncos, sus abuelos. La imagen de sus personas mayores cuyos frutos han dado una, y otra y hasta tres o cuatro genera- ciones, que brotan de un sólo tronco.
Enhorabuena a todas las casa que cuen- tan con un abuelito, felicidades a todas las familias que todavía tienen la oportunidad de tomarse una foto con la abuela, alegría para todos aquellos que contamos con una raíz y un tronco cercano a convertirse que brincaron ya un siglo y un milenio, que nos saben decir quienes somos, de dónde venimos y hasta sabiamente nos sugieren a dónde podemos ir. Un abrazo sentido a todos aquellos que han brindado sus bra- zos, sus ramas, para que tantos vengamos a hacer nido en ese amor ramaje frondoso de amor.
¡Preparémonos Mundial de las personas Mayores!
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desdelafe.oficial desdelafe DesdelaFeOficial 13 de marzo de 2022 9
 OPINIÓN / Un regalo del Papa
para el mundo
Por Redacción DLF @desdelafemx
E l 31 de enero de 2021, el Papa Francisco sorpren- dió al mundo cuando instituyó la Jornada Mun- dial de los Abuelos y de los Mayores, y decidió que se celebrara cada año el cuarto domingo de julio, cerca de la memoria litúrgica de los santos Joaquín y Ana, padres de María y abuelos de
Jesús.
Con este gesto, el Santo Padre ha
querido recordar el precioso regalo que son los abuelos y las abuelas en las familias.
Este 2022, la Jornada se celebrará el 24 de julio, y lleva por tema: “En la vejez seguirán dando fruto”.
El tema, de acuerdo con el Dicas- terio para los Laicos, la Familia y la Vida de la Santa Sede, “pretende sub- rayar que los abuelos y los mayores constituyen un valor y un don tanto para la sociedad como para las comu- nidades eclesiales”.
Es una invitación a revalorizar a los abuelos y a los adultos mayores, “que con demasiada frecuencia son mante- nidos al margen de las familias y de las comunidades civiles y eclesiales. Sus experiencias de vida y de fe pueden ayudar a construir sociedades conscien- tes de sus raíces y capaces de soñar con un futuro más solidario”.
Todas las parroquias y diócesis del mundo están llamadas a unirse a esta Jornada, promoverla y encontrar for- mas de celebrarla de manera local de acuerdo a los contextos de cada Iglesia particular.
La Arquidiócesis de México prepara ya una serie de actividades que se rea- lizarán semanas antes de la Jornada, para sensibilizar a los católicos de este territorio sobre la importancia de los adultos mayores en nuestras comunidades.
         





































































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