Page 14 - Impreso
P. 14
/
COMPRENSIÓN DEL EVANGELIO
DEel santo Evangelio según san Marcos (Mc 7, 1-8. 14-15. 21-23 )
n aquel tiempo, se acercaron a Jesús los fari- cuando escribió: ‘Este pueblo me honra con los labios, pero seos y algunos escribas venidos de Jerusalén. su corazón está lejos de mí. Es inútil el culto que me rinden, Viendo que algunos de los discípulos de Jesús porque enseñan doctrinas que no son sino preceptos huma- comían con las manos impuras, es decir, sin nos! Ustedes dejan a un lado el mandamiento de Dios, para habérselas lavado, los fariseos y los escribas aferrarse a las tradiciones de los hombres’. Después, Jesús
le preguntaron: “¿Por qué tus discípulos comen con manos llamó a la gente y les dijo: “Escúchenme todos y entiéndan-
impuras y no siguen la tradición de nuestros mayores?”. (Los fariseos y los judíos, en general, no comen sin lavarse antes las manos hasta el codo, siguiendo la tradición de sus ma- yores; al volver del mercado, no comen sin hacer primero las abluciones, y observan muchas otras cosas por tradición, como purificar los vasos, las jarras y las ollas). Jesús les con- testó: “¡Qué bien profetizó Isaías sobre ustedes, hipócritas,
me. Nada que entre de fuera puede manchar al hombre; lo que sí lo mancha es lo que sale de dentro; porque del corazón del hombre salen las intenciones malas, las fornicaciones, los robos, los homicidios, los adulterios, las codicias, las injusti- cias, los fraudes, el desenfreno, las envidias, la difamación, el orgullo y la frivolidad. Todas estas maldades salen de dentro y manchan al hombre”.
COMENTARIO
Por P. JULIÁN LÓPEZ AMOZURRUTIA
al hombre. En la escuela de humanismo, sin embargo, nos lleva a encontrar lo de- cisivo de nuestra identidad en lo profundo.
Siempre podemos encontrar pretextos para hablar desde fuera, y justificar lo que ocurre como consecuencia de las condi- ciones exteriores. Sin embargo, donde se juega nuestra verdad es en lo hondo. Ahí donde la más decisiva intimidad se en- cuentra con el mismo Señor que nos ha dado la vida. Él es, como dijo san Agustín, el más íntimo de mi propia identidad. Je- sús nos enseña nuestra consistencia per- sonal llevándonos a la raíz misma de nuestro ser. Y sí: ahí está Dios. Y de ahí pueden brotar también aquellas conductas que nos separan de Él. Hacernos cargo de nuestro interior es hacernos cargo de nuestra identidad y de nuestra relación con Dios.
¿Por qué no nos detenemos a analizar dos o tres comportamientos, para descu- brir de dónde provienen nuestras moti- vaciones? Esta semana procuremos ser más conscientes del origen de nuestras decisiones, evitando la superficialidad.
El valor de formar nuestro interior
D esde Jerusalén, la ciudad santa y emblema de iden- tidad religiosa para los ju- díos, llegan los expertos de la ley judía, y se escandalizan porque algunos discípulos de Jesús no vigilan escrupulosamente determinados precep- tos. En el caso que nos ilustra el pasaje de hoy: comen con las manos impuras. No se trata de una cuestión higiénica, sino de la atención a los mandamientos de Dios. Jesús hace ver, sin embargo, que aquello no son sino tradiciones humanas. Apoyándose, entonces, en fórmulas de Isaías, muestra que el pueblo puede hon- rar a Dios con los labios, pero mantenien- do su corazón lejos de Él. Jesús aprovecha entonces para enseñar a sus discípulos la relevancia del corazón, es decir, de la
interioridad humana.
Lo que mancha al hombre –es decir,
lo que lo aleja de Dios– son en realidad
conductas que brotan de dentro. Aunque se manifieste en lo exterior, el elenco de pecados que presenta proviene del inte- rior. Las maldades salen de dentro, y son las que manchan al hombre.
Jesús es maestro de humanidad. Nos enseña a descubrir nuestro misterio como seres humanos. No teme mirar nuestra conducta y nuestras costumbres a partir del espacio esencial donde se gestan: desde lo hondo. Sólo desde lo hondo se identifica la verdad del ser humano. Rom- per la continuidad entre la interioridad y la exterioridad es, en realidad, fragmentar
@desdelafemx
De nuestro interior pueden brotar las conductas que nos separan de Dios.
14 29 de agosto de 2021 desdelafemx desdelafe.oficial desdelafe DesdelaFeOficial www.desdelafe.mx