Page 5 - Impreso
P. 5

  Por P. Sergio Román del Real @desdelafemx
N uestro padre de la tierra es la primera imagen de pa- ternidad que recibimos, y de la cual partimos para poder comprender la paternidad de Dios. Si tenemos un buen papá, la impresión de Dios será buena... pero, ¿y si nuestro padre
de la tierra nos falla?
Quizás por eso el “Día de las madres”
sea tan importante en México, porque de alguna forma es la mamá de la que reci- bimos los valores propios del hogar: ter- nura, seguridad, confianza, estabilidad.
Ni modo, parece que el hombre mexi- cano, con su inseparable carga de machis- mo, no ha sabido ser un padre incondicionalmente responsable,
capaz, también, de dar ternura a
los hijos. Desde luego que hay excepciones y, lo reconocemos
con gusto, cada vez son más los
papás que saben serlo.
Yo puedo decir: “gracias papá, porque me ayudaste a compren- der el amor de mi Padre Dios”.
Pero, ¿no es cierto que a mu- chos hijos les gustaría poder llamar a Dios “mamá”, porque ella ha sabido ser, de mejor ma- nera, una imagen de amor?
GRACIAS, MAMÁ
La maternidad no es algo mera-
mente biológico. Hay mamás que engendran y dan a luz a un hijo,
pero el hijo recibe el amor y el ñamiento de otra persona, sea quien sea, que en realidad es la verdadera mamá.
¿Por qué la mujer, en relación a sus hijos, es más responsable, más entregada?
Podríamos decir que es el instinto que
Muchas madres buscan su realización personal sin renunciar a la maternidad.
        A Dios lo llamamos “Padre” porque Él escogió ese nombre para que comprendiéramos el amor que nos tiene.
La maternidad no es algo meramente biológico. Hay mamás que engendranydan luz a un hijo, pero el hijo recibe de otra persona el amor y el acompañamiento.
se manifiesta en la mujer desde la cuna. La mujer ha sido hecha por Dios para ser madre, y eso lo lleva hasta la última célula de su ser.
Pero también podemos decir que es la educación que, hasta ahora, ella recibió en su hogar. Nuestra cultura, nuestra tradi- ción,estenerengranapreciola maternidad y recibir con amor a los niños en el hogar. ¡Todavía!
Poco a poco se nos van me- tiendo otras costumbres de im- portación, que, en nombre de la liberación de la mujer, van lo- grando que se desprecie el papel
de madre y que se busque más la “reali- zación” de la mujer, ¡como si el ser una buena madre no fuera la plenitud del ser mujer!
Pensar que hoy hay madres jóvenes que se avergüenzan de serlo. Pero hay otras que gozan su maternidad, y viven inten-
  acompa-
 www.desdelafe.mx desdelafemx desdelafe.oficial desdelafe DesdelaFeOficial 9 de mayo de 2021 5
 






































































   3   4   5   6   7