Page 9 - Impreso
P. 9

        PIÉNSALO DOS VECES
Por ALBERTO QUIROGA
          Leyendo la mano
NO CREO QUE EL FUTURO se pueda ver en la palma de la mano, aunque puedo leer algo sobre mí. La extiendo y veo cinco dedos, podrían ser sólo tres por un acci- dente que sufrí, así que agradezco a Dios pues recuerdo que los tengo prestados. Cada que cierro la mano, la piel se pliega en el mismo lugar y eso ha provocado las líneas, tanto en dedos como en la palma. La repetición de un acto deja huella, y me cuestiono qué hábitos han dejado marca
en mí y le dicen a los demás cómo soy. Tengo las uñas recortadas y limpias, y re- cuerdo la escuela primaria, cuando me bajaban puntos por mala limpieza o por traerlas largas. Aunque no me gustaba, a la distancia sé que tuvo su razón de ser.
Veo un callo pequeño que antes era grande donde se asienta la pluma. Cada vez escribo menos a mano y más en com- putadora. Las huellas dactilares me dicen que soy único. Comparo ambas manos. Soy diestro y se nota en el tamaño mayor frente a la izquierda. Usarla más la ha de- sarrollado aun cuando al nacer eran iguales.
@desdelafemx
Mis manos se ven un poco arrugadas en su dorso. Los años van pasando. Veo cica- trices. De algunas recuerdo su origen, otras sólo son testigos del paso del tiempo.
La mano es ayuda cuando la brindo y es desprecio cuando la niego. Sirve para crear o destruir, para acariciar o maltratar. Analizar para qué la he usado me da un indicio de qué tan bueno o malo he sido y puede anticipar así mi futuro.
Así que leo mis manos. Su desarrollo y uso, son el reflejo de lo que soy. Analizar qué, cómo y para qué las ocupo me ayu- dará a corregirme y modificar mi ser.
  www.desdelafe.mx desdelafemx
desdelafe.oficial desdelafe DesdelaFeOficial 1 de agosto de 2021 9























































































   7   8   9   10   11